Cascada en un paisaje rocoso es una pintura de Jacob Ruisdael realizada entre 1660 y 1670.
Aunque el paisaje es de Escandinavia, Ruisdael nunca había visitado este escenario.
Desde mediados de la década de 1650 se embarcó en una serie de cuadros de cascadas, rodeadas de altos árboles, inspirada en la obra del artista Allart van Everdingen, que sí había recorrido Noruega y Suecia en 1644.
Fuente: Wikipedia
Pintor, artista gráfico y dibujante, Jacob van Ruisdael se formó en el entorno familiar con su padre Isaack, que ejerció de pintor y fabricante de marcos, y con su tío el paisajista Salomon van Ruysdael.
Fue un artista precoz, sus primeras obras están fechadas en 1646, cuando no contaba todavía con veinte años. Dos años más tarde su nombre está registrado en el gremio de San Lucas de Haarlem.
Hacia 1656 está documentado en Amsterdam, donde obtuvo la ciudadanía tres años más tarde; durante estos años su obra se tiñó de una mayor complejidad. Los paisajes de invierno, las escenas con torrentes, los molinos o las marinas, en las que se recogen los influjos de Jan de Porcellis y Simon de Vlieger, fueron temas que Ruisdael llevó a sus telas. En algunos de estos paisajes se ha llamado la atención sobre un posible simbolismo, que tendría sus claves en el significado de las cascadas y de los molinos de agua entre otros elementos.
Ruisdael, a diferencia de su padre y de su tío, cambió la «y» de su apellido por una «i», fórmula que empleó a lo largo de su vida para firmar sus óleos. Meindert Hobbema fue su alumno más aventajado, y de entre todos los imitadores y seguidores que tuvo destacan su primo Salomonsz. Ruysdael, Cornelius Decker, Adriaen Verboom y Roelof de Vries.
Muere, posiblemente en Amsterdam, el año 1682.
Fuente: Museo Thyssen - Bornemisza